Errores que deben de evitarse en diseño interior

El dominio de los elementos y principios del diseño interior representan una base teórica de gran importancia que podrán garantizar que la reforma y decoración posterior estarán bien hechos y nos serán satisfactorios.

Sin embargo, en no pocas ocasiones se cometen ciertos errores que deben evitarse en diseño interior porque atentan contra nuestro objetivo de lograr un acabado armónico y de buen gusto.

A continuación, presentaremos una lista de los errores más comunes que suelen cometerse y que deben de evitarse:

  1. Armonía y patrón no se logran creando todo igual

Uno de los errores más comunes en diseño interior, en especial de aquellos interioristas que están comenzando y a los que les falta experiencia, es creer que obligatoriamente un juego de muebles siempre tiene que ser los mismos o que los colores siempre deben ser iguales.

Es cierto que la armonía se logra con un balance y un patrón de los elementos desplegados dentro del espacio, pero eso no significa replicar exactamente igual los colores y las texturas porque sí.

El arte del diseño de interior es saber jugar con elementos dispares y diferentes para crear una armonía y un balance entre la proporción y la escala.

  1. El diseño interior no es un museo

Otro error que suele cometerse una y otra vez es la de aplicar un diseño interior en alguna habitación específica y que esta sea intocable, es decir, no se puede sentar en los sillones o en el sofá ni utilizar la mesa de centro y muchísimo menos usar la habitación para ninguna actividad en absoluto.

El objetivo primario del diseño interior es darle vida al lugar que se esté decorando, alimentarlo de buen gusto y que sea parte activa de nuestra vida diaria, es decir, disfrutar de ese espacio y convertirlo en una parte integral de nuestros hogares y no en un museo intocable.

  1. Decorar no es sinónimo de un estilo único

Es cierto, en ocasiones al aplicar un diseño de interior que hace uniformemente con un único estilo porque el objetivo es ofrecer una atmósfera atractiva, esto suele hacerse mucho en restaurantes y negocios muy específicos, pero cuando se trata de nuestros hogares esa regla debe de flexibilizarse.

Perfectamente es válido que diferentes espacios posean diferentes estilos y cada uno de ellos tenga sus propias fortalezas basadas en las características del entorno y en su funcionalidad.

  1. El mal gusto no es sinónimo de audacia

Muchas veces los interioristas que están comenzando tienen una sed inmensa de audacia, de atrevimiento y de osadía en sus diseños, es un rasgo positivo siempre y cuando se aplique siguiendo los principios y elementos básicos del diseño interior porque de lo contrario lo que crearán será algo atroz y espantosamente kitsch.

Recuerden que el mal gusto no es sinónimo de audacia y siempre debe de evitarse, porque algo mucho peor que la ausencia de diseño de interior, es un diseño de interior horroroso.

  1. Lo bueno no debe reservarse a “ocasiones especiales”

Existen muchos elementos hermosos y poderosos que inexplicablemente permanecen escondidos dentro de los muebles en espera de “ocasiones especiales” que rara vez llegan.

Si lo que se desea es crear un diseño de interior impactante y atractivo hay que sacar provecho de aquellos objetos hermosos que tenemos a la mano, por ejemplo, el hermoso juego de vajilla que quedaría perfecto para la mesa de comedor o la pequeña colección de figuras que conjugarían perfectamente con el mobiliario de la sala.

La vida en sí es una ocasión especial, nunca se guarden lo bueno que tengan, sino que aprendan a usarlo en su provecho.